Diabetes en bebes

Tratamiento de la diabetes infantil

Hay dos formas de diabetes durante el embarazo:Si la diabetes no está bien controlada durante el embarazo, el bebé está expuesto a altos niveles de azúcar en sangre. Esto puede afectar al bebé y a la madre durante el embarazo, en el momento del parto y después del nacimiento.Los bebés de madres diabéticas (IDM) suelen ser más grandes que otros bebés, sobre todo si la diabetes no está bien controlada. Esto puede dificultar el parto vaginal y aumentar el riesgo de lesiones nerviosas y otros traumatismos durante el parto. Además, los partos por cesárea son más probables. Es más probable que un MDI tenga periodos de bajada de azúcar (hipoglucemia) poco después del nacimiento y durante los primeros días de vida. Esto se debe a que el bebé se ha acostumbrado a recibir de la madre más azúcar del necesario. Su nivel de insulina es superior al necesario después del nacimiento. La insulina reduce el azúcar en sangre. Pueden pasar días hasta que los niveles de insulina de los bebés se ajusten después del nacimiento.Los IDM tienen más probabilidades de tener:Si la diabetes no está bien controlada, las probabilidades de aborto espontáneo o de que el niño nazca muerto son mayores.Un IDM tiene más riesgo de defectos congénitos si la madre tiene diabetes preexistente que no está bien controlada desde el principio.Síntomas

¿Puede un lactante tener diabetes?

Un tipo de diabetes menos conocido es la diabetes neonatal, que es poco frecuente y afecta a los lactantes. Mientras que la diabetes de tipo 1 suele diagnosticarse durante la infancia, la diabetes neonatal suele diagnosticarse antes de que el bebé cumpla seis meses. La diabetes neonatal está causada por una mutación genética que a veces puede ser hereditaria.

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¿Puede tener diabetes un niño de 12 meses?

La diabetes es una enfermedad crónica que puede aparecer a cualquier edad, incluso en el primer año de vida de un niño. A veces, el diagnóstico se retrasa en bebés y niños pequeños porque los síntomas de la diabetes son similares a los de otras enfermedades.

Signos de advertencia de la diabetes en niños pequeños

La diabetes hace que un embarazo sea de alto riesgo. Esto se debe a que la diabetes puede causar muchos efectos potencialmente negativos tanto en el bebé como en la madre. El azúcar en sangre es la fuente de alimentación del bebé y pasa de la madre al bebé a través de la placenta.

Cuando una mujer tiene diabetes y sus niveles de azúcar en sangre están mal controlados (demasiado altos), el bebé recibe cantidades excesivas de azúcar. Como el bebé no tiene diabetes, puede aumentar sustancialmente la producción de insulina para utilizar este exceso de azúcar. Este ciclo anormal de acontecimientos puede dar lugar a varias complicaciones, entre las que se incluyen:

La macrosomía se refiere a un bebé que nace con un peso superior a 4.000 g (8,8 libras) o que nace con un peso superior al percentil 90 para la edad gestacional. En respuesta al exceso de azúcar que recibe el bebé, éste produce grandes cantidades de insulina para convertir el azúcar en grasa corporal. Es decir, el bebé está siendo "sobrealimentado" mientras se encuentra dentro del útero.

Como resultado, el parto puede ser más difícil para el bebé y la madre, con un mayor riesgo de lesiones para ambos. Además, las probabilidades de requerir un parto por cesárea pueden ser mucho mayores cuando el bebé es demasiado grande. La mayoría de los obstetras realizan una ecografía para estimar el peso fetal antes del parto y determinar si es seguro intentar un parto vaginal. Intentar dar a luz por vía vaginal a un bebé muy grande, sobre todo cuando la madre tiene diabetes, puede provocar una de las urgencias obstétricas más aterradoras, una distocia de hombros, en la que la cabeza del bebé sale pero los hombros son demasiado grandes para caber por el canal del parto.

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Signos de diabetes en niños de 1 año

Los órganos del bebé se forman durante los dos primeros meses de embarazo, a menudo antes de que la mujer sepa que está embarazada. Un nivel de azúcar en sangre que no esté controlado puede afectar a esos órganos mientras se están formando y provocar defectos congénitos graves en el bebé en desarrollo, como los del cerebro, la columna vertebral y el corazón.

La diabetes que no está bien controlada hace que el nivel de azúcar en sangre del bebé sea alto. El bebé se "sobrealimenta" y crece más de lo normal. Además de causar molestias a la mujer durante los últimos meses del embarazo, un bebé demasiado grande puede provocar problemas durante el parto, tanto para la madre como para el bebé. La madre puede necesitar una cesárea para dar a luz. El bebé puede nacer con los nervios dañados debido a la presión sobre el hombro durante el parto.

Una cesárea es una intervención quirúrgica para hacer nacer al bebé a través del vientre de la madre. Una mujer con diabetes mal controlada tiene más probabilidades de necesitar una cesárea para dar a luz. Cuando el bebé nace por cesárea, la mujer tarda más en recuperarse del parto.

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Diabetes tipo 1 en bebés

Contenido de la páginaLa diabetes mellitus es una enfermedad crónica que afecta a la capacidad del organismo para transformar los alimentos, especialmente los azúcares (hidratos de carbono), en combustible para el cuerpo. Un nivel elevado de glucosa en sangre debido a un tratamiento inadecuado de la diabetes puede dañar el corazón, los vasos sanguíneos, los riñones, los ojos y el sistema nervioso a lo largo de muchos años.Formas de diabetesLas dos formas más comunes de diabetes son la diabetes tipo 1 y la diabetes tipo 2. Ambas formas pueden aparecer a cualquier edad. Ambas formas pueden aparecer a cualquier edad, pero los niños tienen más probabilidades de que se les diagnostique diabetes de tipo 1.Diabetes de tipo 1

La diabetes de tipo 1 se produce cuando el páncreas no produce suficiente cantidad de una hormona llamada insulina. Esto impide que el organismo pueda utilizar el azúcar, que se acumula en el torrente sanguíneo. Estos azúcares (también llamados glucosa) que el organismo no puede utilizar salen del cuerpo por la orina y se llevan el agua consigo. Aunque la diabetes de tipo 1 puede empezar a cualquier edad, hay periodos de máxima incidencia entre los 5 y los 6 años y, de nuevo, entre los 11 y los 13 años. El primer síntoma suele ser un aumento de la frecuencia con la que el niño orina, sobre todo por la noche.

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